Tipos de piedras
DIAMANTE
La palabra diamante proviene del término griego adámas, que significa invencible o inalterable. El diamante es una forma de carbono que tiene la más alta dureza y conductividad térmica de todos los materiales conocidos por el ser humano.
El diamante es uno de los minerales más preciados del mundo por sus características físicas y ópticas. Pequeñas cantidades de defectos o impurezas inducen un color de diamante azul, amarillo, marrón, verde, violeta, rosado, negro, naranja o rojo. El diamante también tiene habilidad para dispersar luz de diferentes colores, lo que resulta en su brillo característico.
La mayoría de diamantes naturales se forman en condiciones de presión y temperatura extremas, existentes a profundidades de 140 km a 190 km en el manto terrestre. Su crecimiento tiene lugar en períodos de 1.000 a 3.300 millones de años y son llevados cerca de la superficie de la Tierra a través de erupciones volcánicas profundas.
El diamante en bruto se estudia y se talla para optimizar sus características. La talla más común es la talla brillante (redonda), pero existen otras ampliamente usadas en joyería, como son las tallas baguette, princesa, oval, marquise, pera, corazón…
Para la realización de nuestras piezas seleccionamos las piedras de mejor calidad, adquiridas a través de nuestros proveedores en Amberes, la más importante Bolsa de Diamantes del mundo
ESMERALDA
La esmeralda es una variedad de berilo cuyo color se debe a la presencia de cromo y/o vanadio.
Es una piedra preciosa muy valorada que une a su color verde especialmente intenso la propiedad de ser transparente o al menos traslúcida. Su nombre, posiblemente persa, significa piedra verde y su tonalidad ha dado nombre al color verde esmeralda.
La esmeralda de calidad gema debe ser transparente, aunque casi nunca está libre de inclusiones e imperfecciones internas, el llamado «jardín”.
Colombia es el principal productor mundial de esmeraldas de calidad gema, siendo mundialmente conocidas algunas de sus minas, como Muzo o Chivor.
Otros yacimientos están situados en Brasil, Zambia, Mozambique y Zimbabue, así como en Afghanistán y en La India.
RUBÍ
El rubí es una variedad de corindón, que debe su color rojizo a los metales de hierro y cromo con los que está asociado. Su nombre viene de ruber, que significa ‘rojo’ en latín.
Le corresponde la dureza 9 en la escala de Mohs. Es considerado una de las cuatro gemas preciosas junto al zafiro, la esmeralda y el diamante.
Es una de las piedras más caras; encontrar rubíes de gran tamaño es tan raro como encontrar diamantes. El rubí en muchos casos forma una parte esencial de las insignias reales y otras piezas de joyería famosas.
El color del rubí puede variar entre el rosado y el rojo, esto depende del contenido de cromo y hierro de la piedra. El color más deseable es el llamado “rubí sangre de pichón”, que es de color rojo puro con un toque de azul. Se encuentran yacimientos de rubíes en Birmania, SriLanka, India, Madagascar, Tailandia, Brazil, Colombia, China y Rusia, además de encontrarse en menor cantidad en Sudáfrica, Australia, Groenlandia y EE UU.
Los de la península de Malaca y Tanzania son muy valiosos, llegando a alcanzar en valor a los diamantes del mismo tamaño.
ZAFIRO
El zafiro es un mineral precioso del grupo del corindón con característico color azul, aunque hay otros colores menos comunes. De hecho se llama zafiro a todos los corindones que no son rojos. Es una de las cuatro gemas más importantes del mundo y de las más hermosas junto al rubí, el diamante y la esmeralda. Le corresponde la dureza 9 en la escala de Mohs.
La palabra zafiro viene del hebreo chappir que significa pulcro.
Zafiros de muy buena calidad proceden de Birmania, Sri Lanka e India. El mejor zafiro indio es de color azul y se encuentra en Cachemira, estando los mayores productores en Africa. Actualmente se han encontrado yacimientos en Sudamérica y en un área muy extensa en Queensland Central, (Australia). La Antártida es rica en este mineral pero, debido a su delicado equilibrio ecológico, se ha limitado la explotación.
OTRAS PIEDRAS
Además de los diamantes, esmeraldas, rubíes y zafiros que tradicionalmente se han venido usando en Joyería, existe una gran variedad de piedras de muy diferentes colores cuya belleza permite realizar piezas de muy alta calidad.
Turmalinas, peridotos, tanzanitas, kunzitas, amatistas, citrinos, topacios… Algunas de ellas, por sus características (tamaño, pureza o intensidad de color) y escasez pueden incluso llegar a superar el valor de las tradicionalmente conocidas como piedras preciosas.